Está claro que con las nuevas tecnologías y la llegada de internet y el wifi a casa, estamos rodeados continuamente de radiación. La cosa es que ahora a ver quién es el valiente para deshacerse de ello. Sin la comodidad de internet en casa, este blog no existiría y muchas de las cosas que Gerard aprende por internet tampoco las podría hacer, así que... he tenido que pensar la forma de camuflar el router para no sentirme tan mal. Como se suele decir, ojos que no ven...
Si tu también te pones de los nervios al ver parpadear a todas horas las luces del router, hoy os traigo una solución muy muy sencilla y barata.
Lo primero de todo, busca una caja de cartón con las medidas del router. Si es con tapa mucho mejor, ya que te quedará completamente resguardado dentro de la caja.
Mide la zona de los cables del router y traspasa las medidas a la caja.
Corta por la línea que has marcado y comprueba que el router cabe perfectamente y los cables pasan por el hueco sin problemas. Cuidado al manipular los cables si tenéis fibra ya que es muy delicado y se puede romper con facilidad.
Listo!! Ya tenemos nuestro router refugiado. Además, tal y como se aprecia en la primera foto, también he quitado de la vista los cables sin necesidad de regletas. Quedan justos detrás de la caja y no hay que manipularlos nada más que para limpiar la zona.
En el caso de que la caja que hayas seleccionado no sea de tu agrado, puedes pintarla con chalk paint o forrarla con tela o papel. Quedará de lo más bonita. Yo la dejaré como está, el mensaje de la tapa me anima cada día!! ;)
¡¡Feliz martes y feliz día de la mujer trabajadora!!
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