Qué estampa tan bonita la de ayer. Cada mañana de camino al trabajo encuentro caravana, pero ayer... fue un día para disfrutar. Desee que durase muuuucho tiempo.
Ver las montañas nevadas, mientras los copos llenan el parabrisas. Los árboles cargados de nieve, dejando caer el exceso...
Un día en el que la concentración se perdía por momentos en la oficina, dejando paso a las preciosas vistas.
Al dejar de nevar a media mañana, pudimos contemplar la impresionante transformación. Las nubes se fueron despejando permitiéndonos volver a ver la Montaña de la Mola, que había quedado tapada por la niebla. Una montaña completamente blanca, que a día de hoy aún quedan restos de esa nieve que tanto nos ha hecho disfrutar.
Seguramente muchos de vosotros estáis acostumbrados a ver estos paisajes blancos, a circular y pasear entre la esponjosa y fría nieve, pero aquí, en Barcelona, no es algo habitual y lo vivimos con mucha alegría.
Dicen que AÑO DE NIEVES, AÑO DE BIENES. esperemos que así sea!!
¡¡Feliz Jueves!!
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